EN UN LUGAR DE NO PALABRAS... VIVE LIBÉLULA ROJA...

Cada vez mas soy amante de no palabras...

Y aunque sigo arrastrando mi deformación profesional de estudiar la filosofía durante 5 años, de la cual estoy consciente, siempre desde la niñez, me atraía el mundo misterioso del mas allá de las palabras, por eso me he volcado en la danza, en la poesía, y en otros viajes y encuentros.., en la Experiencia de la Vida.... Por supuesto, la filosofía, por un lado te abre la mente, te ayuda a pensar, a reflexionar... pero que es pensar sin Vivir?... ¿y que es Vivir?...

Ayer encontré este muy interesante texto, que tenia subrollado y abandonado entre otras tantas recogidas de "perlas". Algo que pone mucha luz sobre nuestro comportamiento dirigido por nuestro lenguaje, sobre nuestra comunicación, nuestra percepción Ilusoria del mundo Separado a través de la Forma del Lenguaje. Aquí os dejo algunas de sus citadas:

"Mas que vivir en la Percepción Pura de la Realidad, vivimos prisioneros del simbolismo del lenguaje. El hombre no domina el mundo simbólico de su lenguaje, sino que es dominado y condicionado por él."
"Eso explica la compulsión a imponer su propio código simbólico. Si esbozáramos una fenomenología de cualquier discusión entre humanos advertiríamos la patológica necesidad que tiene cada parte de imponer su visión simbólica de la realidad... Nada delata tanto la necesidad que tenemos los unos de los otros como nuestras mismas discusiones y querellas. Nos sentimos incomunicados si la otra parte no acepta nuestro sistema simbólico. Somos incapaces de trascender lo simbólico y darnos la mano a un nivel más hondo y real"...

"EL LENGUAJE ES POR LA NATURALEZA DUALISTA. SURGE DE LA SEPARACIÓN DE LA COSA REAL Y EL SÍMBOLO QUE LA DESIGNA."

"No obstante, en todas las épocas ha habido hombres que han intuido una Realidad más profunda y mas amplia, más allá de los límites del lenguaje y de la cultura. Se les llama sabios, místicos, maestros espirituales", o simplemente ... locos...

Cierto día, el gran poeta Tao de haikus Basho iba paseando con su discípulo Kikaku. Los dos se quedaron mirando las libélulas que revoloteaban por el aire. En ese momento, Kikaku compuso este haiku:

¡Libélulas rojas!
Quítales las alas
y serán vainas de pimienta."

El Maestro respondió: "No. De ese modo has matado a las libélulas. Di más bien:

¡Vainas de pimienta!
Añádeles alas
y serán libélulas."

El texto cogido de la introducción a los haikus de Matsuo Basho por Francisco F. Villalba.

Buenos días de Vivir.